Expertos como la dra. Mª José Burgués dan trucos para calmar la sensibilidad en época de alergia al polen

Cuando todo el mundo puede empezar a abandonar el nido de acuerdo a los acotados horarios de la desescalada, el polen es un nuevo enemigo que acecha a algunos con síntomas de alergia. Los niveles de polen en el aire están en su zénit como consecuencia de una primavera lluviosa, hecho que afecta a que más de uno se encuentre especialmente mal, con síntomas como la congestión nasal, el escozor de ojos o con picores en la piel. De hecho, según la sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), el pole han aumentado dos veces más que el año pasado y ello favorece la aparición de más reacciones alérgicas durante estos meses. Esto está dando a síntomas como los brotes de lo que parece acné, inflamación o ronchas. ¿Por qué ocurre? “Por los niveles de histamina, que pueden producir reacciones en el tejido, sensibilizándolo y produciendo reacciones automáticas o ante los productos cosméticos que utilizaba”, explica Valeria Navarro, directora técnica de la firma Boutijour.

¿Qué es la histamina?
“Es una sustancia química que, en realidad, está presente en el organismo humano. Cuando una persona es alérgica a una sustancia, como es el polen en esta época, el sistema inmunitario responde a él porque lo concibe como algo nocivo. En este esfuerzo por protegernos, se desata una cascada de reacciones entre las que está la liberación de la histamina que actúa en zonas como los ojos, la nariz, la garganta, la piel o los pulmones provocando los síntomas que todos entendemos como un brote de alergia”
, explica la doctora María José Burgués, del centro Médico Estético MESBUR, en Huesca. Entonces, cuando alguien toma un antihistamínico, lo que está intentando es inhibir los síntomas que provoca la liberación de la histamina, pero según los niveles de alergia que se tengan, esto no siempre funciona tanto como uno desearía y la sensación sintomática se puede mantener.

¿Cómo afecta a la piel?
En la piel, esto se puede traducir en la aparición de rojeces, en una inflamación o, incluso, en la presencia de posibles granitos, ocasionando una situación que se puede mantener en el tiempo si no se toman las medidas adecuadas. En palabras de Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8 “En estas situaciones, recomendamos que el paciente acuda a su médico para asegurar que está tomando la medicación adecuada. En cuanto a la piel, normalmente aconsejamos cambiar y reducir su régimen de belleza. Esto lo hacemos porque los productos que usamos a diario responden a unas necesidades de la piel, pero esas necesidades cambian en estas situaciones y los productos que usamos de forma continuada pueden resultar demasiado fuertes, intensificando los síntomas que presente la piel”.

“Si, cuando tienes la piel sensible, la pones en contacto con algún ingrediente y reacciona mal, podrás crear reacciones cruzadas, pudiendo desencadenar incluso una mastocitosis. Los mastocitos son componentes de nuestro sistema inmunitario que se liberan cuando tenemos un brote de alergia. Por ejemplo, si te pica y te rascas, pica más. Esto ocurre por esos bichitos, por llamarles amistosamente”, Explica la doctora Burgués.

¿Cómo tratarlo?
En estas situaciones, los expertos aconsejan también hacer una visita a sus terapeutas habituales, puesto que habrá que analizar si la piel ha sufrido un proceso de sensibilización y si requiere un cambio de prescripción hacia fórmulas más pensadas en aplacar esos síntomas y no alrededor de las preocupaciones que se estuvieran tratando previamente (arrugas, finas líneas, manchas, etc.). “Se debe extremar el cuidado general de la piel, evitar contacto con sustancias que sean irritantes y buscar la máxima hidratación del tejido. También se recomienda aumentar el nivel de probióticos, tanto a nivel tópico como alimenticio”, comenta Raquel González.

Se puede hablar de que hay una serie de alimentos que son apropiados cuando suben los niveles de histamina, como la manzana o el aguacate, las bebidas de avena o sésamo, las infusiones sin teína, la yema de huevo y las verduras de hoja verde, legumbres -salvo garbanzos- y las carnes, salvo las de cerdo o los derivados, como los embutidos. Alimentos a evitar en estas situaciones: chocolates y derivados, café y té, los mariscos y las conservas, frutas como las fresas, las naranjas o la papaya, los lácteos y los frutos secos, entre otros.

Otra clave para tratar los síntomas es ayudarse de principios que ayuden a respirar mejor, “puesto que la congestión y los problemas respiratorios pueden inducir a brotes acneicos por una falta de oxigenación. Estos brotes son típicos de zonas zomo las mejillas, zona asociada al pulmón”, comenta Bella Hurtado, directora de educación de Aromatherapy Associates.

Cosméticos que podrán paliar los síntomas
Se deberá reducir al mínimo la rutina de belleza para dejar de mandar principios a la piel que pueden producir una sobre activación y un aumento de la sensibilidad o los síntomas que presente. En este sentido, menos es más. “Serán de vital importancia los ingredientes hipoalergénicos, los activos calmantes como la niacinamida, y los principios humectantes poco sensibilizantes, puesto que incluso el ácido hialurónico puede agravar la situación dependiendo de su peso molecular”, explica Estefanía Nieto, directora técnica de la firma Omorovicza.

Jabones afines con la piel
ZADOR My First Soap está pensado para las pieles más sensibles, como es el caso de las de los bebés. Sus ingredientes son hipoalergénicos y posee lípidos que protegen la barrera al estar diseñados a semejanza de los de la piel humana, de manera que la piel los percibe como un principio afín y los asimila mejor.

Limpiadores suaves
Omorovicza Cashmere Cleanser está formulado con una mezcla de activos calmantes para limpiar las pieles más sensibles. Cuenta con caléndula, aceite de albaricoque y manteca de karité entre algunos de sus principios.

Cremas hipoalergénicas
Hypoallergenic Nourishing Moisturizer es hidratante y nutritiva. Sus ingredientes están formulados para las pieles más sensibles. Ayuda a reparar la barrera natural de la piel y mantener su elasticidad. Ideal para piel seca o sensible y lo suficiente suave para ser usada después de tratamientos estéticos.

Aceites esenciales
Support Breathe Roller-Ball de Arcalma, ayuda a respirar mejor y previene recaídas. Se puede llevar consigo durante los paseos, inhalar, usar en la muñeca y en el cuello. Cuenta con una mezcla natural de aceites esenciales de primera prensa de pino, árbol de té y eucalipto para facilitar la respiración y refrescar los sentidos.

Sueros antiinflamatorios
Medik8 Clarity Peptides Este suero contiene tres activos potentes: 10% de niacinamida que calma y alivia el enrojecimiento, imperfecciones y piel con manchas, péptido Crystalide cual que da un aspecto saludable PCA de zinc que minimiza la producción de sebo y equilibra las bacterias de la piel para combatir las imperfecciones.

Mascarillas calmantes
Boutijour Snow Lotus Water Calming Mask es una mascarilla con un poder altamente calmante. Tiene propiedades sumamente hidratantes, reparadoras y antioxidantes. Es perfecta para pieles sensibles, estresadas, cansadas y deshidratadas. Con solo 15 minutos de uso, puede calmar y curar la piel irritada.


Fuente original: Comunicae.es.

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