El calzado de seguridad laboral, un bien indispensable, según Suministros Tomás Beltrán

La importancia del calzado de seguridad en el trabajo no es un tema que hay que descuidar o tomarse a la ligera. Según los últimos datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el 30% de las reclamaciones es de incapacidad tienen que ver con las lesiones en el pie. Suministros Tomás Beltrán, profesional en suministros industriales, afirma que estas lesiones se deben principalmente por utilizar un calzado inadecuado en el trabajo. Una mala elección del calzado laboral puede causar desde ampollas y lesiones superficiales a pies planos, arcos mal formados o dolores permanentes.

Además de provocar que el trabajador se vuelva poco productivo, un mal calzado también puede generar graves problemas en su salud podológica. Además, gracias al calzado de seguridad laboral se pueden evitar una gran cantidad de accidentes. Por este motivo es fundamental usar calzado adecuado para cada trabajo. Algunas consecuencias de accidentes por no usar un calzado adecuado pueden ser cortes y dedos rotos, quemaduras por salpicaduras de metal o químicos, descargas eléctricas por contacto con una fuente eléctrica sin protección, esguinces, fracturas, huesos rotos, etc.

Un suelo resbaladizo, una mala señalización, la colocación de materiales de forma inadecuada, una mala iluminación, pueden ser factores de riesgo para los accidentes. Con un zapato de seguridad se pueden evitar una gran cantidad de consecuencias fatales. Suministros Tomás Beltrán recomienda que el calzado lleve un buen sistema de ventilación para los pies y una suela con material antideslizante, además de las características propias de los zapatos según la necesidad de cada puesto de trabajo. Para evitar los dedos aplastados, serán necesarios los zapatos con puntera plástica metal free y con plantilla antiperforación textil.

Una de las lesiones más habituales son las del empeine y los cortes en el metatarso. En el caso de los trabajos rurales, el calzado que debe usarse con aquellos que tienen un refuerzo metatarsal. No obstante, los zapatos, por mucha puntera y metal que tengan, no deben resultar incómodos o pesados. La planta del pie también sufre en trabajos en los que se pueden encontrar elementos punzantes en el suelo. Las plantas antiperforación no metálico son el calzado perfecto para evitar esas lesiones sin añadir al zapato un peso extra. Para evitar cortes por el uso de herramientas afiladas, se pueden usar zapatos con refuerzos exteriores de cuero espeso.


Fuente original: Comunicae.es.

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